sábado, 16 de abril de 2011

Kiss Army!

01.15 AM: Al fin, el silencio complice de la noche la lleva a dormirse sin saber que un ejercito de besos espera su momento para atacar.
El pelotón de audaces, intrépidos, irrespetuosos y obstinados ósuclos, prepara su estrategia durante el dia.
Primero tienen que ser enviados, recibidos, aceptados y por últimos depositados.
Los pasos fueron los correctos y la victima inocentemente los coloco en su mesita de luz, al lado de la lámpara, donde esperaron y esperaron hasta que el momento llegó.
01.45 AM: Pacientes, diagraman el plan a la perfeccion. La tercera hora del nuevo dia marcaria el inicio del descomunal ataque.
El cable de la lámpara seria el nexo perfecto entre la cama  y la lejana mesita de luz… un largo camino por la desértica almohada los depositaria en su cabeza. Escalarla no sería fácil, su pelo sedoso les jugaba en contra. Una vez en la cima, el descenso debía ser perfecto. La boca era el blanco, no podía haber fallas! Debían caer lo suficientemente suave para mantenerla dormida, y lo suficientemente fuerte para que su inconsciente recibiera el estimulo.
2.50 AM: El teniente general de la armada, ultima detalles con comandantes, coroneles, oficiales y sub-oficiales. El momento se acerca y la adrenalina aumenta. Las tropas organizadas en grupos de a 15 esperan la orden.
3.00 AM: En silencio, en orden, y con tenacidad,  los primeros soldados trepan el cable que los conducirá a la cama. Les resulta mas fácil de lo planeado por lo que la llegada a la cama de los 150 “besoldados”  (como les gusta que los llamen) se realiza con gran calma y rapidez.
3.20 AM: La almohada es un sitio abrumador, casi sin relieves, sin puntos de referencia, que sumados a la oscuridad hacen del viaje un interrogante. Hace 20 minutos que los “besoldados” partieron de la mesita de luz, perdiendo contacto con su torre de control, casi de inmediato. Ahora… solo  el instinto los llevará a destino.
3.46 AM: PELO, SIENTO PELO! Se escucho exclamar entre susurros al valiente que lideraba el primero de los grupos.
Esa fue la hora de llegada a lo que se consideraba el real comienzo de la expedición. El problema era como llegar a la cima sin provocar tirones de pelos que dieran por tierra el plan. La tecnologia de los “besoldados” no estaba en condiciones de desafiar el espacio aereo asi que las unicas posibilidades eran si o si por tierra.
3.55 AM: El tiempo corria y los “besoldados” comenzaban a pensar que la expedición no habia sido buena idea, teniendo en cuenta que nadie habia pensado como escalar la cabeza de la preciosa victima del ataque. A lo lejos, casi al fondo se escucha uno de los soldados razos que susurra algo… el mensaje fue pasando hasta llegar al coronel. POR EL HOMBROOOOO!!!
4.05 AM: terminada la piramide besistica con base en el pecho… se comenzó el ascenso.
4.15 AM: Mas de una hora después del paso inagugural, el primer beso llego al blanco elegido. Uno a uno los “Besoldados” fueron muriendo al estilo kamikaze en su boca. 150 valientes, arriesgados, depositaron sus ultimos esfuerzos en complacer a sus labios, solo para que por la mañana se los recuerde con una sonrisa de esa misma boca que durante el dia se convertira en parlante de sus palabras… para después a la noche… tranformarse nuevamente en el  blanco perfecto para un nuevo ataque…